Mesoterapia facial. Técnica consistente en microinyecciones intradérmicas de vitaminas, ácido hialurónico y PRP, según necesidades individualizadas en cada caso. Su objetivo es regenerar la piel, aportando luminosidad e hidratación.

Relleno con ácido hialurónico. Tratamiento consistente en infiltración de ácido hialurónico para corrección de arrugas, volumen de pómulos o labios, hidratación facial. Tratamiento mínimamente invasivo, reabsorbible, duración de aproximadamente 12 meses, variando en función del paciente.

Toxina Botulínica. Infiltración de toxina botulínica con el fin de relajar la musculatura y atenuar las arrugas de expresión severas. Tratamiento mínimamente invasivo, con una duración de 4 a 8 meses, dependiendo de cada caso.

Peeling facial. El peeling es un tratamiento dermatológico basado en la exfoliación de las capas más superficiales de la piel para favorecer su sustitución por otras de mejor calidad y textura. El peeling facial permite renovar la piel de la cara y eliminar impurezas para conseguir un rostro más luminoso. Al mismo tiempo unifica el tono de la piel y elimina algunas de las manchas causadas por el sol. Duración del resultado depende del grado de envejecimiento de la piel, de la edad, la profundidad del peeling, etc. Según la piel de cada paciente, suelen recomendarse entre 1 a 4 peelings al año.

IPL (Luz Intensa Pulsada). Tratamiento estético que consiste en una luz de alta intensidad que cuando entra en la piel determinados pigmentos naturales la absorben y la convierten en calor. Mejora los signos de la edad, manchas del sol o estrés sobre la piel consiguiendo un rejuvenecimiento total del rostro. Se recomiendan entre 3 y 5 sesiones durante el invierno.